Hay un nombre que resuena en nuestra memoria, un grito que evoca recuerdos de emociones y aventuras: «¡Lorencitooooooo!». Este llamado, arraigado en la serie cubana «Hermanos», se ha convertido en un ícono perdurable a lo largo del tiempo., se convirtió en un ícono que perdura en el tiempo. Detrás de ese memorable personaje se encuentra el talentoso actor Rini Cruz, cuya actuación dejó una huella imborrable en la audiencia. Pero, ¿qué ha sido de la vida de este actor desde entonces? Hoy te invitamos a descubrirlo.
Los primeros pasos de Rini Cruz en la televisión cubana lo llevaron a interpretar papeles en producciones como «Sacrificio de Mujer» y «Secreto de Amor». No obstante, fue su papel en «Hoy es siempre todavía» (1987) lo que cambió el rumbo de su vida de manera significativa. Durante el rodaje de este drama, cruzó caminos con Anabel Leal, una actriz con quien estableció una relación que ha perdurado a lo largo del tiempo y con quien tiene dos hijos. Aprovechando la química palpable entre ellos, el director Miguel Sanabria los unió nuevamente en «Una muchacha» (1987), donde dieron vida a los personajes de Rubén y Nelia.
A pesar de sus múltiples interpretaciones en la televisión cubana, un personaje en particular ha quedado grabado en la memoria con especial cariño: Marcos Urquiza en «Pasión y Prejuicio», donde Rini Cruz encarnó la pareja de Dianelys Brito. Esta interpretación enriqueció aún más su legado en la pantalla, resonando con el público y dejando una huella imborrable.
En medio de su carrera en Cuba, Rini Cruz participó en la grabación de «La Leyenda del Rayo». El actor recuerda que la producción presentó un desafío inusual cuando tuvieron que grabar una escena que requería llamas y no había gas.
El camino de Rini Cruz lo llevó a Angola, donde ejerció como director de TV y compartió su experiencia en la formación de actores. Junto a su esposa Anabel, viajaron a Estados Unidos con visas de turistas, listos para enfrentar nuevos desafíos. Sin embargo, la realidad les presentó obstáculos inesperados, incluyendo comentarios que sugerían que Estados Unidos era «el cementerio de los artistas».
Rini Cruz no se dejó desanimar. Comenzó su andadura en Estados Unidos en la construcción, un campo totalmente diferente al de la actuación mientras que su esposa Anabel tuvo que hace de housekeeping (limpieza de casas). Su determinación y perseverancia lo llevaron a encontrar su lugar nuevamente en el mundo de las telenovelas. Participó en producciones como «Secreto de Amor» y «Amor comprado», demostrando su versatilidad y pasión por la actuación.
Hoy en día, Rini Cruz trabaja junto a su esposa Anabel Leal en la compañía familiar Imago Studio, centrada en la producción audiovisual. Su historia es una prueba viviente de que la perseverancia, la pasión y el amor por el arte pueden superar cualquier adversidad. Desde «Lorencitooooooo» en «Hermanos» hasta su resiliente travesía en busca de nuevos horizontes, Rini Cruz ha tejido una historia de inspiración y fortaleza en el mundo de la actuación.