El reconocido músico cubano, Lenier Mesa, ha vuelto a ser noticia recientemente debido a sus controvertidas declaraciones sobre su intención de regresar a Cuba. El pasado 6 de octubre durante una presentación en el restaurante cubano «Mojitos Tampa», Lenier afirmó con determinación que viajará a Cuba cuando le plazca, a pesar de las críticas y las posturas previas que había expresado.

«Yo a Cuba ,voy a ir, ¡porque me da la gana a mí ir pa’ Cuba! No tengo nada que hacer allá ahora… pero si yo vuelvo a Cuba no es pa’ ver a nadie de ahí de los comunistas esos. Es porque yo soy cubano, yo no soy mexicano ni boricua, ni nada de eso. Yo soy cubano 100%». Enfatizó Lenier Mesa durante su actuación, repitiendo un discurso que había dado previamente en Orlando.

Este anuncio ha generado un fuerte rechazo por parte del exilio cubano, que aún recuerda su viaje a Cayo Santa María y sus intentos de justificarlo con una supuesta visita a un abuelo enfermo, visita que posteriormente negó haber realizado. Anteriormente, Lenier había declarado en exclusiva para Cuba en Miami que no regresaría a la isla hasta que se produjera un cambio radical en la situación política, un cambio que aún no ha ocurrido.

El músico cubano, quien recientemente se presentó en un concierto en Orlando, ha desafiado a sus críticos y ha arremetido contra el presentador cubano Alexander Otaola. Durante su actuación, afirmó que los artistas como él siempre serán queridos por su público y que no permitirá que las críticas le afecten.

Lo más sorprendente de su declaración es su intención de regresar a Cuba cada vez que le plazca, rompiendo con su posición previa de no hacerlo hasta que se produjera un cambio en la isla. Esto contrasta con su reciente viaje a Cayo Santa María, donde se presentó en un festival en hoteles vinculados al régimen cubano.

Lenier Mesa se presenta en Orlando y sorprende con su anuncio ¡Cada vez que quiera ir a Cuba voy a ir porque me da la gana a mí!

Lenier incluso dedicó insultos tanto a Otaola como al líder cubano Miguel Díaz-Canel, utilizando una frase comúnmente empleada en las protestas contra el régimen cubano. Este cambio radical en su postura ha desconcertado a muchos de sus seguidores y ha generado controversia en la comunidad cubanoamericana.

La controversia sigue rodeando a Lenier Mesa mientras continúa su camino en el mundo de la música, enfrentando el escrutinio público y las opiniones divididas de su audiencia.