Detrás de su decisión de dejar su país, hay una historia personal que cuenta algo mucho más complicado

Una noticia impactante ha sacudido a Cuba la querida periodista deportiva Julita Osendi ha decidido dejar su país natal y mudarse a Florida, Estados Unidos. Esta decisión no solo marca el final de su carrera en la televisión cubana, sino que también revela los cambios profundos que están ocurriendo en la isla.

Julita Osendi ha sido conocida por su cobertura de eventos deportivos importantes, como los Juegos Olímpicos y campeonatos mundiales. Sin embargo, su partida no se trata solo de su trabajo, sino también de los desafíos que enfrenta Cuba hoy en día.

Cuba tiene una historia de luchas y cambios, pero actualmente se enfrenta a dificultades. Julita Osendi criticó el discurso repetitivo del gobierno, que culpa a factores como el bloqueo por los problemas del país. En sus propias palabras, «el oxígeno ha ido escapando de Cuba y no se puede respirar». Ella explicó en una entrevista con CiberCuba que su hijo la reclamó legalmente.

Osendi también mencionó la falta de medicinas, los cortes de electricidad y la mala calidad de las viviendas. Además, señaló la desigualdad entre los líderes y la gente común. Julita contó que este caos no solo afecta a La Habana, sino a todo el país. Ella describió a Cuba como una nación en ruinas, desordenada y con gente que parece que ya no le importa mucho con la típica frase cubana: «ya les da lo mismo 8 que 88”.

Osendi  ha hecho más de 50 programas y documentales especiales sobre deportes. Es la primera mujer en Cuba que ha ganado el respeto y la admiración como periodista y comentarista deportiva. Solía apoyar la revolución y a Fidel Castro en el pasado. Sin embargo, según ella, esos sueños se han desvanecido.

En una entrevista realizada por Swing Completo Deportes TV comentó: «en este país tú puedes haber trabajado como una bestia como es mi caso, una bestia no…dos, tres bestias. Yo llegué a trabajar días y días y días sin descanso…». «Aquí hay grandes atletas ¿qué de qué viven macho? O se casaron con un extranjero o pusieron una paladar o tienen un hotelito. Por Dios… tú te ves atletas de renombre cubano pero vendiendo huevos por la calle. Ahora no…ahora ni huevo pero bueno cuando hubo huevos. «Es muy triste y eso se permite en un país donde dicen que el estado no es fallido si esto no es fallar que se estén yendo millones de muchachos por esos volcanes. Si eso no es fallar yo no sé qué cosa es fallar».